OH JEHOVÁ, AVIVA TU OBRA
Habacuc era un hombre que quería respuesta; perturbado por lo que observaba, formulaba preguntas difíciles, mientras Habacuc aguarda la respuesta a sus preguntas, Dios le ofrece el don de una verdad que satisface sus sueños más íntimos “La justicia de Dios se alcanza sólo por medio de la fe” (2:4).